Aprender cómo funciona el dinero es vital para la libertad financiera y, en definitiva, para lograr la verdadera prosperidad integral. No se trata solo de aprender o de mejorar en la habilidad para realizar alguna actividad laboral, es decir,  aquella que nos permite ganar dinero, lo cual es de suma importancia, sino de mejorar o desarrollar la habilidad para manejar adecuadamente el dinero que ganamos, de manera que, entre otras cosas, podamos seguir por un camino de mucha mayor productividad y de libertad financiera.

Hacer explotar el poder de hacer dinero que está en nosotros requiere de formación, aprendizaje continuo y sobre todo de educación financiera.

La idea central es, entonces, que si deseamos experimentar abundancia financiera o simplemente no sufrir grandes problemas en esta área de nuestras vidas, debemos aprender a cómo hacer dinero sin caer en la trampa del consumismo, aprendiendo a administrarlo eficientemente y a invertirlo.

En este sentido, desarrollar nuestra inteligencia financiera es la clave para la verdadera prosperidad y libertad financiera.

Si quieres hacer riquezas duraderas debes desarrollar esa capacidad inherente, ese poder que Dios te ha dado para hacerlo. ¿Cómo? Educándote en al menos tres áreas: contabilidad, mercadeo o marketing e inversión (kiyosaki 1997). No se trata necesariamente de hacer licenciaturas o especializaciones en estas materias, sino de aprender los principios básicos y de saber aplicarlos a nuestras finanzas, profesiones, negocios. El objetivo es:

• Que aprendamos de contabilidad para que logremos leer e interpretar nuestros estados de cuenta, aplicar controles fiscales, ajustar nuestros presupuestos y en definitiva tener el control sobre nuestro dinero y el lugar a donde va. 

• Que aprendamos del marketing para saber cómo funcionan los mercados; saber negociar, promover y vender eficaz y eficientemente algún tipo de producto o servicio e incluso, a vendernos a nosotros mismos. 

• Y aprender sobre inversión para ir adquiriendo buenos activos que nos generen dinero pasivo.

Ahora bien, la inteligencia financiera debe desarrollarse conjuntamente con la emocional y la espiritual. 

Por lo general si nuestra vida interior esta descuidada y fuera de control también lo estarán, mas temprano que tarde, nuestras finanzas. La codicia, la avaricia, el miedo y el amor al dinero, entre otras cosas, son enemigos de la verdadera libertad financiera. Por lo cual, a mi parecer, esta triada es fundamental para mantener el equilibrio de una vida plena y abundante.

En conclusión, una de las claves fundamentales para hacer dinero constante y resolver eficaz y eficientemente nuestro asuntos financieros - en un contexto de prosperidad integral-  es la educación financiera, ya que indistintamente de cuál sea nuestra situación socio-económica, política o religiosa, aprender a controlar el dinero y su poder es vital para experimentar una vida plena, abundante y feliz.

Este post es un extracto del ebook  "Poder para hacer riquezas" de la asociación civil para vivir a plenitud.